Emilio Azcarra, tenia la visión de este equipo reivindicándolo, pero ahora como un equipo antagonista , al equipo ya consolidado el Guadalajara, quería hacer del América, el equipo mas popular ,como el mas odiado o el mas querido de México ,y, lo logro, utilizando el recurso que mas difusión tiene este país la televisión, pero este emporio no viene solo, viene solapado e incubierto por el gobierno , que por aras del destino Miguel Alemán fue vicepresidente del club América en aquellos años de consolidación del equipo, con esta confabulación de la empresa televisiva y el gobierno , utilizando como estandarte las ideales nacionalistas de impulso al deporte y salud , se construyo el estadio azteca. Que dejaría una gran ganancia a esta empresa, construyéndolo con dinero del erario publico, por motivo de los juegos Olímpicos del 68 y el mundial de México 70, produciendo ganancias multimillonarias tanto al Estado como al presidente de la empresa televisiva, y, nuevamente la televisión cumple su función enajenante, maquillando el movimiento estudiantil de esos años, como lo indica Sergio Valera Hernández: 8
“México se convertiría en uno de los países “estelares” del así llamado “concierto de las naciones”, en la medida que seria sede 1968, de los juegos Olímpicos y en 1970 del Campeonato Mundial de fútbol. Sobra decir que la situación política nacional no se correspondía con la imagen que el propio régimen priísta expuso al exterior del país “
8 Varela, Ibíd., Num. 69. www.razonypalabra.org.mx.
Es visible el convenio de las empresas televisoras y el gobierno, que parece imperceptible para el ojo común, desarrollando estas, el escape que el mexicano necesita para interrumpir su marcha en el tiempo, reflejando, y, actuando recíprocamente al comportamiento dual y popular del mexicano, creando una televisión con el mismo contexto, ya sea, fútbol, telenovelas, noticias, documentales, comerciales, etc. Se enfocan en generar un sentido de pertenencia (documentales del bicentenario), solo con el fin de obtener riquezas a costa de los mexicanos, que se resumen en votos o consumismo, y, equivalen las dos en poder político y económico. La televisión y el gobierno se ven como entes externos, pero no son ajenos, al mexicano, son populares, porque él mismo los ha hecho populares, por lo cual son parte de la cultura popular. Se puede ver esto, cada sexenio, a principios del noveno mes del año, un personaje, con retórica cantinflesca, emitiendo un discurso para el colectivo humano, reunidos por costumbre y ritual en la sala observando la televisión o en otro medio de comunicación, esperando aquellas palabras que lo hacen sentir mexicano o emitiendo castillos en el aire, de una esperanza nula. Probablemente la reacción de uno o dos mexicanos al discurso, sea ambigua, de afirmación o negación, pero no faltara aquel mexicano que no le perjudique ni le beneficie, sino todo lo contrario.
Referencias
Paz, Octavio. El laberinto de la soledad. Ediciones Cuadernos Americanos, México, 1950.
Bartra, Roger. La jaula en la melancolía. Identidad y metamorfosis del mexicano, México, Delbelsillo ,2005.
Varela, Sergio. La afición azulcrema y el poder de televisa. Una aproximación etnográfica al club del fútbol América, Razón y palabra, Num. 69. http://www.razonypalabra.org.mx/.
Boicotun0....http://www.myspace.com/boicotuno_antagonista
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